ORIGEN:
Argentina
REGION:
Valle de Uco, Mendoza. 960 metros sobre el nivel del mar.
ENOLOGO:
Gabriel Bloise
PAGINA WEB:
Bodega Chakana
La bodega fue fundada el año 2002, retomando un antiguo legado familiar. A finales del Siglo XIX, sus antepasados elaboraban vinos de calidad en la región montañosa de Valtelina, Italia.
Chakana se dedica al estudio y la comprensión de algunos de los mejores terruños de Argentina con el objetivo de producir vinos auténticos que expresen la identidad y el carácter de sus suelos. Chakana está ubicada en Agrelo, Luján de Cuyo (Mendoza), donde posee 80 hectáreas de viñedos con certificación orgánica y biodinámica. Además, cuenta con fincas ubicadas en otras áreas de Mendoza como: Mayor Drummond (Luján de Cuyo) y Altamira (Valle de Uco).
A partir del año 2012 Chakana comenzó un trabajo a conciencia para recuperar y mantener la armonía de sus suelos e inició la transición a orgánico/biodinámica de los métodos de cultivo para todas sus fincas.
El manejo vitícola de Chakana está orientado a la estructuración y preservación de la biología del suelo y a un desarrollo vegetativo balanceado de la vid, en forma compatible con la textura del suelo de cada lugar, su contenido de materia orgánica y su susceptibilidad a las heladas.
La Finca Nuna recibió la Certificación Orgánica a partir de la cosecha 2014 y tiene certificación Deméter (biodinámica) a partir de 2016. Finca Los Cedros (Altamira) obtuvo la certificación orgánica en 2016.
La Chakana
A lo largo de la extensa región de los Andes que va desde Quito hasta Mendoza, hay una imagen que se repite de manera recurrente en edificaciones, objetos y decoraciones. Es la cruz cuadrada, que para los antiguos pueblos que habitaron los Andes era síntesis y símbolo del mundo Andino.
El nombre Chakana evoca el símbolo que representaba para los Incas a la constelación de la Cruz del Sur, que era utilizada como elemento de orientación espacial y temporal con gran importancia para la agricultura.
Desde el punto de vista etimológico, el nombre de la cruz, “Chakana”, tiene su origen en la piedra que se utilizaba en las acequias para desviar el agua hacia los cultivos. Un objeto simple y poderoso, llave de la vida misma en los Andes.
A lo largo de los siglos este objeto adquirió un significado místico, encerrando en su geometría los cuatro puntos cardinales y los tres elementos de la vida: el aire, el suelo y el agua. Pero es debido a su profundo significado agrícola que la bodega, honra el fruto de estas tierras con su nombre espiritual: Chakana.
El vino argentino puede construir una identidad común basándose en estos factores naturales y en su fusión con el saber hacer occidental respecto de una de las plantas más emblemáticas de su cultura: la vid.
Winemaking
El estilo de elaboración de Chakana utiliza el criterio de intervenir lo menos posible en los procesos de fermentación, utilizando levaduras indígenas, minimizando las intervenciones con SO2 (anhídrido sulfuroso) y otros aditivos, y privilegiando el uso de materiales porosos en la crianza (cemento sin epoxi y toneles), de manera de conservar el carácter del lugar en el vino.
Los vinos de Chakana se elaboran en una bodega de 2.100.000 litros de capacidad ubicada en la Finca Cobos, equipada con tanques de acero inoxidable y piletas de hormigón con y sin epoxi. Cuenta con una capacidad de crianza de 500.000 litros en barricas de roble francés y toneles de roble.
La elaboración esta a cargo de Gabriel Bloise, un miembro de la nueva generación de enólogos Mendocinos perfeccionado a través múltiples vendimias en las principales zonas vitivinícolas del mundo (Toscana, Priorato, Australia, California). Gabriel entiende la enología como un medio para expresar la naturaleza y cree que los mejores vinos son los que no llevan la marca de quien los elabora sino de los lugares donde se desarrollan.