Aceite De Oliva El Cortijo 500cc
| Categoría: Aceite De Oliva
| Productor: Viña Las Perdices
| Capacidad: 500 cc
| Tipo: Aceites
| Variedad: Virgen Extra.
| Corte: 100% Blend de Frantoio, Nevadillo y Arauco.
| Lugar de elaboración: Barrancas, Maipú. Provincia de Mendoza. 1030 S.N.M.
| País: Argentina.
| Elaboración: Molienda dentro de las 24 hs de recolectadas las aceitunas. Selección y deshoje por corriente de aire. Elaboración en decanter de 2 fases. Posterior decantación y filtrado.
| Notas de Cata: Color dorado con reflejos verdes. En nariz presenta un frutado de aceituna fresco y muy intenso. Con aromas que recuerdan a hierbas recién cortadas, alcachofa, hojas de tomate y manzana. En boca presenta un frutado a aceituna medio con notas de otras frutas como manzana, banana y almendra verde. De amargor suave y picante medio. Tiene una persistencia agradable y duradera. Se percibe complejo, elegante y muy armónico.
| Maridaje: Aceite De Oliva El Cortijo 500cc resulta ideal para aliños y demás consumos en crudos. También como aderezo básico para pan, y en salsas para pastas, risottos, pizzas y bruschettas.
| Acerca de la bodega:
HUELLAS
La vitivinicultura argentina está marcada por las historias de inmigrantes europeos que llegaron a estas latitudes y dejaron para siempre su huella en la cultura de esta parte de Sudamérica. Además nuestra historia tiene ese mismo origen y un final que se escribe cada vez que alguien bebe alguno de nuestros vinos.
Nuestro padre, Juan, llegó de Andalucía a principios de los años 50 para desarrollar en Mendoza el cultivo de la vid. De él aprendimos que el trabajo está siempre por sobre el reconocimiento, que la tierra marca el compás de la labranza y que la austeridad es la máxima virtud. Fue en 2004 cuando junto a mi hermano Nicolás decidimos dar un paso más y construir una bodega en donde elaborar vinos de alta calidad, con una gran fascinación por la innovación. Así en abril de ese año fundamos Las Perdices en el corazón de nuestro viñedo en Agrelo, aquel en donde crecimos y aprendimos a hacer vino desde que tenemos memoria.
Vivimos en un reino que se compone de vides, familia y trabajo. Un amado territorio habitado también por las perdices que inspiraron nuestro nombre. Como nosotros, éstas son aves que se arraigan a climas secos y pedregosos. Como nosotros, las perdices no migran sino que eligen su casa y a base de esfuerzo la hacen su hogar.
Todo lo que aprendimos durante una vida en la viña concluye no sólo en nuestros vinos, sino en aquellos que los beben y nos dejan acercarles parte de nuestra historia.